"Me operé, pero que nadie se entere"
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A pesar del paso del tiempo y la popularidad que ha venido ganando la medicina estética, todavía sigue siendo muy común que las personas sean juzgadas al momento de practicarse una cirugía estética. Pero al fin y al cabo no deja de ser una decisión muy personal, que no debe tomarse buscando aceptación en la sociedad.
Realizarse una cirugía estética no tiene nada de malo y cada quien podrá discernir si hacerla pública o no, al fin y al cabo cada quien es dueño de sus actos y de lo que hace con su cuerpo, siempre y cuando sea de manera responsable.
Las intervenciones estéticas son los procedimientos más demandados tanto por hombres como mujeres a nivel mundial, la mayoría de las personas que se llevan a cabo una intervención de este estilo decide mantenerla en secreto, usualmente, para evitar ser consideradas como frívolas, capaces de poner como prioridad su aspecto físico frente a otros factores de su vida.
En realidad, a nivel psicológico, preocuparse por su aspecto físico no tiene absolutamente nada de malo, siempre y cuando sea dentro de los parámetros normales, sin que se convierta en una obsesión, en algunos casos la cirugía estética es la única forma que tienen ciertas personas con complejos para superarlos, por ejemplo: una nariz demasiado grande, pequeña o deformada, un acné demasiado agresivo que deja cicatrices en la cara, entre otros. Estos traumas pueden afectar la vida cotidiana de las personas y hasta la forma en la que se desenvuelven en sociedad.
No todas las cirugías se pueden mantener en secreto
Las personas que desean mantener en secreto su procedimiento quirúrgico deben tener claro que no todas las cirugías pueden esconderse fácilmente, por la naturaleza misma de ellas, además de que algunas muestran cambios demasiado radicales en la fisionomía de las personas como para poder ocultarlas.
Es decir, se puede ocultar una inyección de relleno facial con botox, pero ¿se puede ocultar una lipoescultura, una rinoplastia, un bypass gástrico o unas prótesis mamarias? No solo por los resultados finales, sino por el proceso de recuperación que puede ser un poco largo.
Si lo que buscas es que nadie se entere de que te realizaste una operación, entonces debes optar por transformaciones sutiles. Subir una talla de sostén es algo que no se nota mucho, pero si se aumentan tres tallas más, no habrá manera de poder ocultarlo. Los cambios ligeros tienden a pasar más por desapercibidos y eso evita preguntas incómodas por parte de terceros imprudentes.
“Sí, quiero mantener mi cirugía en secreto”
Preparar el terreno: Depende de la cirugía que las personas vayan a llevar a cabo, se recomienda decirle a sus amistades que inició una dieta "milagrosa" un mes antes de realizarse una liposucción. Para ello, utiliza durante un tiempo ropa algo más ancha y después de la intervención ve usando prendas cada vez más adecuadas a tu nueva talla, así todo el mundo pensará que la dieta está dando resultado.
Debido al maltrato característico de una intervención quirúrgica en el cuerpo, es normal que aparezcan moretones e hinchazón, que se pueden ocultar con las prendas de vestir. Por tal motivo, se debe practicar la cirugía en épocas que no haga tanto calor para poder utilizar abrigos y ropa holgada que ayudan a pasar desapercibido.
Durante la recuperación trata de no salir de la casa (o hacerlo únicamente por casos de emergencia), así evitas que las personas que te conocen, al verte, tengan alguna sospecha. De igual manera, debes hacer lo posible por no recibir visitas, una buena excusa, es decir que vas a pasar unos días fuera de la ciudad, o que tienes alguna enfermedad contagiosa leve.
Si quieres mantener el secreto en el trabajo, puesto que el reposo por una cirugía electiva puede ser causa de despido o de sanciones. Se recomienda ejecutar estos procedimientos durante el periodo de vacaciones, o en caso contrario, puedes decir que la operación se realizará por una causa funcional y no estética, de esta manera se excusaran los días de ausencia laboral.
Ahora, si la intervención es en el rostro, es un poco más difícil de ocultar, se sugiere, para desviar la atención, hacerse un cambio de look (cortar o teñir el cabello), de esta manera, la transformación o cambio en tu rostro puede ser atribuido a este hecho.
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Infidelidad cosmética
Es un fenómeno que ocurre cuando las personas se hacen algún tratamiento estético y lo mantienen oculto a su pareja, a fin de hacerles creer que poseen una belleza natural, manteniéndose esbelta a través del tiempo. Otra razón para mantenerlo oculto, es evitar las discusiones por el dinero invertido en estos tratamientos.
Por mucho que se trabaje por ocultar estos procedimientos, es posible que alguien muy observador termine dándose cuenta y preguntándole por ello. Si es una persona de confianza que guardará el secreto ¿Por qué no decirlo? Total, siempre se necesita una persona que sea capaz de brindar apoyo frente a ciertas situaciones, por otro lado, si la persona nos es de mucha confianza, queda de tu parte decirle o no, pues al fin y al cabo, por mucho que hablen, la única persona que debe saber la verdad eres tú y el médico.
Finalmente, si se descubren las intervenciones, tampoco es mal de morirse, no hay nada de qué avergonzarse. Miles de personas se someten cada año a intervenciones de cirugía estética para verse mejor. Estar contento consigo mismo y con tu propio cuerpo es una gran sensación, la cual te abrirá las puertas a miles de proyectos, no por su apariencia, sino por la confianza que vas a proyectar.
¿Te has hecho una cirugía y la has mantenido en secreto? ¿Quieres saber si otros han hecho lo mismo? Descúbrelo ingresando en nuestra sección de experiencias. 🤫😷
