Bótox, el mejor aliado para las personas con hiperhidrosis
El sudor es uno de los mayores enemigos de aquellos que nos gusta vernos bien. Este problema no solo afecta nuestro aspecto, sino que también puede provocar malos olores, empeorando aún nuestra imagen ante los demás.
Aunque todos en algún momento podemos sufrir de sudoración excesiva, existen personas que tienen el problema más desarrollado, en estos casos estaríamos hablando de hiperhidrosis.
¿Cómo diferenciamos la hiperhidrosis de la sudoración normal?
Antes de hablar de tratamientos, comencemos, por lo básico, el diagnóstico de la afección. Es normal que, si pasamos mucho tiempo bajo altas temperaturas, nuestro cuerpo comience a sudar, lo anormal viene cuando en cualquier momento del día la sudoración excesiva aparece, incluso cuando estamos en ambientes frescos o hasta fríos.
Las personas con hiperhidrosis se caracterizan por estar todo el día limpiando el exceso de sudor con un pañuelo o tener manchas de sudor en zonas estratégicas de la ropa. Además de mostrar signos de sudoración en estado de reposo, es decir, sin hacer actividad física alguna.
Desafortunadamente, no se ha encontrado el origen del problema, más si varias soluciones médicas poco invasivas, como de la que vamos a hablar el día de hoy, la toxina botulínica, también conocida como bótox.
¿Cómo funciona la toxina botulínica con la hiperhidrosis?
Este compuesto, que es usado como rejuvenecedor facial, se convierte en un bloqueador entre el sistema nervioso y las glándulas sudoríparas, de modo que el primero no le puede ordenar al segundo generar sudor.
Como puedes leer, es una tarea sencilla que puede tener un efecto significativo en los pacientes. Pero, ten en cuenta que esto no significa que nunca se va a sudar, solo que se hace de forma normal, cuando el cuerpo aumente su temperatura de forma excesiva, ya sea por la actividad física o por la temperatura del ambiente.
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¿Dónde se puede aplicar el bótox?
Fácil, en las zonas más propensas a la sudoración, por ejemplo:
- En las axilas. Esta es la parte del cuerpo más susceptible a la sudoración excesiva, por lo que no es de extrañar que sea el punto de partida de muchos pacientes con hiperhidrosis.
- En las manos. Más que todo en la zona de las palmas, la segunda parte del cuerpo más susceptible. Al igual que en las axilas, en esta zona se puede aplicar fácilmente bótox, sin que esto genere una molestia significativa en el paciente.
- En los pies. Sobre todo, en la planta de estos, sí, suena muy extraño y doloroso, pero, descuida, no es un tratamiento muy invasivo, por el contrario, solo se sentirán unos pequeños pinchazos. De todos modos, el médico puede aplicar un poco de crema anestesia para evitar molestias.
- En los genitales. Al ser una zona cubierta por la ropa, no es de extrañar que sea propensa a la sudoración excesiva, por suerte, se ha comprobado que el bótox no genera efectos adversos en los genitales, por el contrario, se usa de manera frecuente para rejuvenecer la zona. Tanto hombres como mujeres pueden aplicarse toxina botulínica. En muchos casos, además de reducir la sudoración, se aprovecha para rejuvenecer la piel que cubre los genitales.
- En el rostro. Esta es una zona un poco obvia, antes de que se descubrieran los efectos del bótox en la sudoración excesiva, ya este se usaba como rejuvenecedor facial. Por lo que su ayuda en reducir la producción de sudor en la frente y la parte baja del rostro se ve como un complemento de su efecto rejuvenecedor.
¿Cómo es el proceso?
- Lo primero que debes saber es que el tratamiento es poco invasivo y no requiere del ingreso a quirófano o periodos de recuperación postoperatorios.
- Antes de aplicar el procedimiento, se va a recibir un diagnóstico por parte del médico, el cual va a determinar las zonas que pueden o deben ser sometidas durante la sesión.
- En menos de media hora se habrá completado la sesión, aunque puede variar si se aplica toxina botulínica en más de una zona.
- El paciente va a sentir unos pequeños pinchazos, sin embargo, es posible el uso de anestesia tópica para zonas más sensibles, como puede ser la planta de los pies o la zona que recubre los genitales.
- No genera marcas ni produce inflamación.
- Una vez concluida la sesión, el paciente puede volver a su rutina diaria, incluso puede llevar a cabo actividades que demanden mucha fuerza, como el ejercicio o la práctica de algún deporte.
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¿Y la durabilidad?
Pasemos a otro punto importante, los resultados.
Una vez llevado a cabo el proceso, se pueden notar avances pasados dos o cuatro días, sin embargo, los resultados se verán con mucho más detalle luego de dos semanas.
Desafortunadamente, la toxina botulínica es un compuesto temporal que es absorbido por el cuerpo, de modo que, pasado los seis meses, aproximadamente, ya no tendrá efecto en la sudoración excesiva. Pero, descuida, puedes repetir el proceso las veces que sea necesario.
Algunos especialistas recomiendan aplicar bótox dos veces por año, como máximo, para garantizar un control total de la sudoración, incluso hay casos de pacientes que con una aplicación al año pueden controlar la hiperhidrosis por completo.
Pero, si el tratamiento es temporal, ¿Por qué es tan popular? Fácil, porque tiene una tasa de éxito que supera el 90%, muy por encima de otros procedimientos como la aplicación de cremas, antitranspirante o consumo de fármacos.
¿Quieres probar el tratamiento?
Normal, con todos los beneficios que ha demostrado tener el bótox para controlar la hiperhidrosis. Pero, recuerda que, como cualquier otro tratamiento estético o médico, solo un profesional de la salud lo puede aplicar.
Los médicos especialistas que pueden ayudarte en el diagnóstico de hiperhidrosis y la aplicación de bótox son los dermatólogos, solo estos te pueden garantizar una experiencia profesional, pero, sobre todo, segura.
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Bibliografía
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del Boz, J., Padilla-España, L. and Segura-Palacios, J.M. (2014) Técnica de infiltración de toxina botulínica en hiperhidrosis Axilar, Actas Dermo-Sifiliográficas. Available at: https://www.actasdermo.org/es-... (Accessed: 26 July 2024).
Hiperhidrosis (2022) Mayo Clinic. Available at: https://www.mayoclinic.org/es/... (Accessed: 26 July 2024).