Los biopolímeros son sustancias prohibidas en muchos países, pero permitidas en otros y corresponde a sustancias sintéticas, como la silicona líquida o derivados de la parafina y se utilizan como relleno estético en las zonas de los glúteos, las mamas, la cara y los labios, pudiendo provocar síntomas que van desde infección, enrojecimiento de la zona, dolores muy intensos y agudos, hasta problemas y daños inmunológicos importantes, produciendo en el organismo irreparables.
Para el Dr. Rito Mariño, Cirujano Plástico de la Clínica Izca en Colombia, los biopolímeros se definen bajo el concepto de Alogesis Latrogénica, que básicamente se refiere a la introducción de compuestos que no son compatibles con el cuerpo humano por medio de inyecciones, las cuales son aplicadas por personas que no cuentan con las certificaciones médicas requeridas o por profesionales de la salud que no poseen ética médica al momento de realizar el tratamiento.
Así mismo, el especialista explica que estas sustancias que se inyectan con la finalidad de dar volumen a alguna zona determinada del cuerpo, son derivados de la silicona, muchas veces de tipo industrial, lo que la hace muy peligrosa para la salud, ya que no son compatibles con el cuerpo humano.
El especialista recalca que también son comunes dentro de la familia de los biopolímeros las sustancias como la parafina, metacrilatos, diferentes tipos de aceites y mantecas. Estos provocan graves problemas de salud en los pacientes, muchas veces irreversibles.
Los síntomas pueden ser variados y se pueden sentir desde el momento en que se inyectan, las horas o los días posteriores y hasta 20 años después de haberse sometido a la intervención.
En esa línea, los principales síntomas son hinchazón y dolor en la zona en la que se inyectaron la sustancia de biopolímeros.
Es importante destacar que se puede producir hasta la muerte, ya que se inyecta la sustancia en un vaso sanguíneo, entrando la sustancia por el torrente sanguíneo y provocando diversos problemas de salud gravísimos como embolias pulmonares en las que el paciente fallece.
La extracción de biopolímeros se recomienda en aquellos pacientes que experimentan síntomas de hinchazón, ardor, fiebre, enrojecimiento de la zona inyectada, problemas inmunológicos y crisis frecuentes que afectan a su calidad de vida.
Si tienes dudas sobre tu caso, siempre es importante consultarlo con un cirujano plástico y reconstructivo certificado.
Para la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva, lo más importante es informarse sobre un profesional que cuente con la debida formación académica y experiencia. Así mismo, el paciente debe cerciorarse que el cirujano tenga el título profesional de Especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora en Colombia.
Adicionalmente, es fundamental que el paciente pueda investigar sobre las opiniones de otras personas que se han sometido a una intervención similar, mirando fotografías del antes y el después, con la finalidad de tener una idea de cómo trabaja el profesional, constatando que sus cirugías cuentan con las expectativas de la mayoría de los pacientes.
Así mismo, es recomendable que el paciente acuda a varias consultas con diversos especialistas para que pueda recibir diversas opiniones y elegir al cirujano que le brinde mayor seguridad.
Finalmente, la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica destaca que es importante chequear que el Cirujano Plástico esté acreditado por la Secretaría Seccional de Salud y Protección Social del Departamento.
Cuando el paciente presenta molestias, hinchazón, enrojecimiento o cualquier otro tipo de complicación debe acudir de manera inmediata al especialista certificado para evaluar y programar el retiro de los biopolímeros.
En ese contexto, el médico evaluará la gravedad según sea cada caso y según sea la parte del cuerpo que habría que extraer la sustancia.
Lo que más se recomienda para la primera cita, según concuerdan los especialistas, es poder valorar personalmente, con ayuda del historial clínico y fotos que darán una referencia de la gravedad de la lesión y un reflejo del “antes y el después’’. Además, es fundamental realizar el examen directo, ya que arrojará qué tipo de cirugía se necesita. Para ello, el especialista realizará palpar los tejidos y evaluar la mejoría parcial o total de la extracción de estos biopolímeros.
En esta primera consulta, el cirujano debe ser realista con respecto a los resultados que se obtendrán, ya que en muchos casos, la gravedad de la lesión es mucha, lo que provoca deformidades, mucho daño en los tejidos e hundimiento de las zonas afectadas al extraer la sustancia.
La extracción de biopolímeros es la eliminación de las sustancias de origen sintético que han sido inyectadas en zonas como glúteos, senos, bíceps, labios o en cualquier parte del cuerpo. En ese sentido, la eliminación de biopolímeros permite que el paciente se pueda someter a una cirugía de extracción del tejido afectado en las zonas donde se inyectó esta peligrosa sustancia; es por esto que cada caso debe ser tratado y evaluado de forma individual.
El objetivo de la cirugía es eliminar la máxima cantidad de sustancia, ante la imposibilidad de retirarla en su totalidad, y evitar así, que los biopolímeros migren a otros tejidos.
La extracción de los biopolímeros es una cirugía de tipo reconstructiva muy complicada. Para conseguir unos buenos resultados se necesitan equipos muy sofisticados y lo más importante de todo, que el cirujano tenga una gran experiencia en este campo.
Por su parte el Dr. Minyor Aveyaneda, el tratamiento de la enfermedad por biopolímeros es un tratamiento integral que tiene un componente médico y un componente quirúrgico. “El tratamiento médico se basa en tomar medicamentos que controlen la respuesta inflamatoria del cuerpo en contra de estos productos y se utilizan en fases iniciales del tratamiento. El tratamiento quirúrgico consiste en la extracción del material extraño del cuerpo. Para esto se requerirá la extracción directa (bisturí) o por liposucción de estas sustancias con el único fin de disminuir y controlar los efectos secundarios’’, destaca.
Cada cirujano tiene su propio tratamiento y técnica para el retiro de estos biopolímeros. La más común es que luego de realizar varias pruebas preoperatorias se realiza una cirugía abierta con anestesia general donde se extrae la sustancia sintética, mejorando la flacidez y aspecto de la zona.
Luego de extraer los biopolímeros se cierra la incisión quedando una cicatriz oculta e imperceptible de la zona en la que se extrajo.
“Se debe estudiar de forma individualizada cada caso de extracción de biopolímeros. Aunque el objetivo primordial es extraer la mayor cantidad posible de estas sustancias y dejar la zona afectada lo más natural posible, hay que tener en cuenta que nunca se consigue retirarlas totalmente ya que los biopolímeros migran a los tejidos vitales vecinos como por ejemplo, nervios, músculos tendones o la piel’’, según explica el Dr. Rito Mariño, quien cuenta con más de 15 años de experiencia en la extracción de este peligroso material.
Consideraciones preoperatorias
Muchos especialistas coinciden que se debe tener varias consideraciones preoperatorias para la correcta extracción de los biopolímeros entre los que se destacan:
Los resultados suelen ser muy favorables, pero varían según sea cada caso. Los más comunes son:
La recuperación de cada paciente es diferente dependiendo de la zona tratada, pero en todos los casos, durante la operación se utiliza anestesia general y el paciente deberá quedar un día internado en la clínica.
La cirugía, tiene una duración de aproximadamente 2 horas, la duración de la hospitalización es de 1 día generalmente. Tras la intervención, el paciente debe guardar reposo absoluto durante los primeros 5, 10 o 15 días según sea evaluado cada caso.
Los especialistas recomiendan acudir a la consulta médica a las 48 horas de realizada la intervención realiza una revisión por parte del equipo médico que volverá a repetirse a la semana para quitar drenajes, puntos y dar el alta.
El paciente podrá incorporarse a su rutina normal a partir de los 15 días según indicaciones médicas.
El tiempo de recuperación total de la zona afectada será de aproximadamente 1 mes según sea la gravedad y tipo de intervención en cada caso.
Es esencial asistir a todos los masajes y controles postoperatorios. Básicamente seguir las recomendaciones del especialista y tomar los medicamentos indicados. En lo posible se debe evitar la exposición a los rayos UV. Además, el paciente debe seguir cuidadosamente las indicaciones de su especialista con respecto al uso de la faja y de asistir a los controles de drenaje, dependiendo del tipo de cirugía.
Las actividades físicas como el deporte se pueden volver a realizar a partir del día veinte de realizada la cirugía y pueden aumentar en intensidad poco a poco.
Los resultados que se obtienen son en su mayoría muy naturales y casi imperceptibles.
Los pacientes quedarán muy satisfechos, sobre todo por el alivio del dolor y las molestias que les presentaba el tener biopolímeros en algunas zonas del cuerpo. Además, del alivio casi inmediato del dolor, el paciente recuperará la movilidad de ciertas zonas y sentirá un aumento importante en su calidad de vida, lo que se traduce en:
Es importante destacar que no todos los pacientes con biopolímeros pueden someterse a la intervención quirúrgica de la extracción. Es por esto que la valoración y análisis de los pacientes, es fundamental previa a la cirugía según sea la gravedad de cada caso.
Las principales complicaciones radican en:
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