¿En qué consiste la cirugía plástica de pezones?
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El correcto cuidado de los pezones es una parte importante para el bienestar general de las personas, independientemente de si se es hombre o mujer. Los pezones se ubican en la zona pectoral y se encuentran compuestos por el pezón y la aureola, en donde el primero es la parte que sobresale y la aureola la zona pigmentada que rodea al pezón.
En muchas ocasiones, los pezones pueden presentar ciertas imperfecciones, como el estar invertidos, demasiado abultados o sensibles y, en la actualidad, es posible realizar su corrección mediante una cirugía plástica, de manera muy sencilla.
La cirugía de los pezones, además de solucionar problemas físicos y estéticos, es ideal para corregir aquellos problemas que afectan a la autoestima y a la estabilidad emocional del paciente.
Aproximadamente un 2% de la población femenina sufre de alguna anomalía en sus pezones, no solamente en cuanto a tenerlos invertidos, sino por presentar diferencias de tamaño y forma.
Generalmente, se piensa que cuando una mujer acude a una cirugía de senos, es para aumentar su tamaño o realizar un levantamiento, después de un embarazo, la lactancia o el factor de gravedad por el paso de los años.
La cirugía de reducción mamaria también es otro de los grandes motivos por los que una mujer decide pasar por el quirófano, debido a que el gran tamaño de los senos puede presentar, no solo una incomodidad emocional, sino también problemas que perjudican su salud.
No obstante, nunca pensamos en aquellas personas que se someten a una cirugía estética para retocar sus pezones, a la cual, no solamente son las mujeres quienes acuden, sino también muchos hombres quienes no se sienten contentos con su apariencia.
Dicho esto, no siempre se trata de aumentar o disminuir el tamaño de los pezones, o de mejorar problemas estéticos, sino también como solución de reconstrucción mamaria a causa de actuaciones naturales, como lo puede ser la lactancia.
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¿Qué es la cirugía plástica de pezones?
Es una intervención en donde el especialista soluciona problemas estéticos del paciente que, influyen en gran medida a nivel emocional y de autoestima. Por lo cual, es una cirugía que tiene como objetivo, corregir asimetrías o crecimiento anormal de uno o de los dos pezones.
Cuando los pezones son excesivamente grandes y abultados, se marcan ante cualquier prenda y, por ende, afectan la estética de las personas, especialmente en el caso de los hombres, ya que no tienen manera de disimularlos. Sin embargo, este no es el mayor motivo por el cual se acude a una intervención quirúrgica, pues la presencia de pezones grandes y abultados traen consigo hipersensibilidad, dolor y malestar al rozar con la ropa.
En el género masculino, la presencia de grandes pezones puede estar directamente relacionada con una ginecomastia, en donde hay un aumento exagerado de las glándulas mamarias.
La intervención a llevar a cabo en este tipo de casos tiene como objetivo mejorar el torso de los hombres, mediante una cirugía que elimine el exceso de grasa de la zona y extirpe el tejido glandular. De la misma manera, esta intervención soluciona casos de pezones excesivamente pequeños o invertidos.
La cirugía plástica de pezones es de gran importancia en casos de mastectomía, en donde se extirpa de manera completa la mama en pacientes que han pasado por una situación de cáncer de mama, incluyéndose en el proceso de una reconstrucción mamaria.
¿Cómo es la cirugía plástica de pezones?
De acuerdo al problema que presenten los pezones, el cirujano especialista determinará el procedimiento más adecuado. Cuando los pezones son demasiado grandes, se deberá reducir el exceso de tejido, eliminando parte del pezón. De esta manera, se conseguirá una apariencia normal y se erradicarán las molestias con las prendas de vestir.
En los pezones invertidos lo que se hace es liberar las fibras que impiden el crecimiento correcto de la zona, consiguiendo una prominencia normal de los pezones.
En los casos de reconstrucción mamaria, se debe crear un pezón utilizando tejido sano del paciente. De esta manera, se conseguirá una mayor feminidad y una apariencia completa de la mujer. Cada situación es diferente y, por ende, se desarrolla de diversas formas. De este modo, el tiempo puede variar y estar alrededor de entre los 10 hasta los 60 minutos.
La cirugía plástica de pezones invertidos tiene una duración aproximada de entre 10 a 15 minutos, mientras que la reconstrucción de pezón gira alrededor de los 15 minutos.
Cirugías más complejas como lo es la reducción de pezón, suelen tener una duración de entre media a una hora. No obstante, existen casos de retoque de aureolas, extirpación de grasa y del tejido glandular para tratar la ginecomastia en el caso de los hombres, que tienen una duración más prolongada.
El tipo de anestesia a utilizar por lo general es local, en donde el paciente está despierto en todo momento del procedimiento y no es necesaria la hospitalización. Por lo cual, cuando finaliza la intervención, el paciente queda un par de horas en reposo y, posteriormente, ya puede regresar a su domicilio para que continúe con el descanso.
La cirugía plástica de pezón hace una pequeña incisión en la base o borde inferior de la zona, por lo que la cicatriz es diminuta y casi no se nota. De esta manera, el paciente no padecerá de problemas con la visibilidad de la cicatriz.
La cicatriz es mucho más visible en los casos de retoque de aureola para la reducción de su tamaño. El procedimiento deja la cicatriz alrededor de la propia aureola, por lo que es importante que el paciente tenga conocimiento de esto antes de proceder a la intervención.
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Cuidados y riesgos tras la cirugía plástica de pezones
Cabe resaltar que siempre se deben seguir las indicaciones del cirujano al pie de la letra y, aunque el procedimiento es bastante sencillo y ambulatorio, no está exento a efectos secundarios o riesgos postquirúrgicos.
Como cualquier intervención quirúrgica, se pueden presentar problemas de infección, mala cicatrización o hemorragias, al igual que daños en los tejidos del pezón o incluso la pérdida de sensibilidad en la zona.
En cualquiera de los casos, siempre hay una solución, y si se presiente algún tipo de problema tras la operación, se deberá acudir de manera inmediata al profesional.
No obstante, se deben evitar los movimientos bruscos o el esfuerzo físico los primeros días, en donde el cirujano pondrá un apósito para proteger la zona, para evitar el roce y las posibles molestias.
El paciente podrá retomar sus actividades normales de manera paulatina y, en los primeros 15 días, se debe evitar de sobre manera la práctica de cualquier tipo de ejercicio físico o deporte.
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